El uso de “piercings” se remonta a antiguas culturas y civilizaciones. Actualmente es una moda ampliamente extendida entre los jóvenes de todo el mundo.
Los “piercings” son pequeños aretes de distintos materiales que se llevan en cualquier parte del cuerpo, especialmente en la ceja, el ombligo, orejas, nariz, y los más atrevidos los usan en los labios, la lengua y hasta en los órganos genitales.
Sin embargo, existen ciertos riesgos como infecciones y/o desgarros cuando se hacen sin las debidas garantías en lugares no autorizados. Se sabe que muchos jóvenes se los colocan ellos mismos o con la ayuda de algún amigo.
En Gran Bretaña por ejemplo, donde el uso de piercings está muy de moda, el gobierno teme que pueda convertirse en una problema para el sistema sanitario del país.
De acuerdo a un estudio del British Medical Journal, en éste país una de cada diez personas, tienen un “piercing” en alguna parte del cuerpo distinta del lóbulo de la oreja y la mitad de ellas son mujeres jóvenes.
Estadísticas señalan que más de una de cada cuatro de estas personas, se quejan de complicaciones como inflamaciones, infecciones y flujos de sangre.
Uno de los mayores riesgos del uso de “piercings”, es la infección de hepatitis, advierten los expertos.
Así que ten mucho cuidado y toma las debidas precauciones, si decides ponerte uno en alguna parte del cuerpo.
Los “piercings” son pequeños aretes de distintos materiales que se llevan en cualquier parte del cuerpo, especialmente en la ceja, el ombligo, orejas, nariz, y los más atrevidos los usan en los labios, la lengua y hasta en los órganos genitales.
Sin embargo, existen ciertos riesgos como infecciones y/o desgarros cuando se hacen sin las debidas garantías en lugares no autorizados. Se sabe que muchos jóvenes se los colocan ellos mismos o con la ayuda de algún amigo.
En Gran Bretaña por ejemplo, donde el uso de piercings está muy de moda, el gobierno teme que pueda convertirse en una problema para el sistema sanitario del país.
De acuerdo a un estudio del British Medical Journal, en éste país una de cada diez personas, tienen un “piercing” en alguna parte del cuerpo distinta del lóbulo de la oreja y la mitad de ellas son mujeres jóvenes.
Estadísticas señalan que más de una de cada cuatro de estas personas, se quejan de complicaciones como inflamaciones, infecciones y flujos de sangre.
Uno de los mayores riesgos del uso de “piercings”, es la infección de hepatitis, advierten los expertos.
Así que ten mucho cuidado y toma las debidas precauciones, si decides ponerte uno en alguna parte del cuerpo.
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